Durante los últimos 15 meses que he usado Kickstarter, 20(!) proyectos de juego de mesa me han llamado la atención como para darles dinero. Es una gran cantidad de juegos y dinero, la cual me lleva a decidir que es hora de cerrar mi cartera por un tiempo. Se vuelve una experiencia adictiva, saber que tienes en tus manos la posibilidad de ayudar a una persona a realizar sus sueños y sacar un producto al mercado.
La realidad es que no todos los proyectos son así de humildes. Cada día vemos juegos que ya han salido o están garantizados a salir y solo funciona como un sistema de preventa. También vemos que muchos de los proyectos, si no es que todos, sufren de retrasos y problemas. El tercer juego que apoye, Dice Age, tiene un poco más de 1 año que termino y aun no reciben sus recompensas unas 500 personas, incluyéndome.
Muchos alegan que Kickstarter solo debe servir para ciertos propósitos, como para inventos nuevos o gente sin los recursos para lograrlos. Creo que la gente vota con su dinero y es un mercado libre. Si alguien quiere dar 10,000 dlls (la máxima cantidad permitida dentro del sitio) para salir con los diseñadores o ver su cara inmortalizada en unas cartas del juego, tienen el derecho a hacerlo. A final de cuentas, quieres ver que la gente tenga éxito y pueda seguir generando los recursos para sacar más de las cosas que te gustan.
Al menos por el resto del año, tendré que poner en pausa mis contribuciones a este espacio. Quiero recibir todos los juegos que apoyé y de ahí re-evaluar que es la mejor forma de seguir apoyando. Sigue siendo un buen espacio y oportunidad para quien busque sacar sus ideas de su cabeza y convertirlas en algo grandioso. O algo terrible. Pero mejor intentar y fallar que nunca haber intentado.